Confianza, honestidad, compromiso son valores que no se pueden comprar cuando una organización busca un proveedor. Sin embargo, más allá de la calidad del servicio, las compañías buscan agencias que se comprometan con los proyectos como si fueran propios.
Partner se busca
Como toda relación, el vínculo se construye con el tiempo. De todos modos, en comunicación interna se necesita de una confianza plena desde el inicio. La agencia de comunicación interna conocerá aciertos y desaciertos, logros y fracasos, luces y sombras para determinar el diagnóstico y poder trazar una estrategia a medida.
Scopen, consultora con sede en Madrid que se encarga del análisis y monitoreo de la relación de agencias-clientes, determinó los diez aprendizajes de este vínculo.
Si bien Scopen hace foco en la comunicación publicitaria, es interesante ver similitudes con la comunicación interna de las empresas.
Entre las conclusiones se destaca que en la fase de consolidación, una vez pasada la etapa de “luna de miel”, el vínculo entre agencia y cliente “se asienta y consolida a través del desarrollo de proyectos en común. Establecer una relación de socios y aportar empatía a la relación son elementos clave para continuar fortaleciendo el nexo”.
Viviendo el negocio y la cultura
La relación que se establece es como la de una sociedad-alianza, que trasciende los objetivos de una campaña o de un proyecto. Ambos deben compartir las metas del negocio.
Para esto, es necesario conocer en profundidad el negocio, cuál es el core, incluso vivir la experiencia como si fuera un cliente para internalizarla.
De la misma manera, la agencia debe conocer la cultura organizacional, comprender el journey map de las personas que integran la compañía, sus valores, su historia.
El propósito es conseguir que esa relación sea cada vez más cercana e intensa.
¿Cómo trabajamos desde Oxean?
Hacemos equipo. Lejos estamos de ser un proveedor más. En Oxean, nos comprometemos con los proyectos y los vivimos junto a nuestros clientes. Este es nuestro mayor diferencial.
Cada vez que avanzamos en una acción, iniciativa o proyecto con un nuevo cliente, solemos recibir testimonios de quienes los lideran que reflejan cierto asombro:
Ese es uno de nuestros diferenciales. Para cada cliente, armamos un equipo dentro de nuestro staff que cuente con las competencias, habilidades y características que requiere nuestro partner/cliente, de acuerdo a la acción y a la cultura organizacional.
Diseñando juntos
Siempre partimos de una necesidad puntual. Pero para nosotros es relevante conocer en profundidad la cultura de la compañía, el perfil de las personas que conforman los equipos y los objetivos que fijaron alcanzar o superar.
Si es viable, lo ideal es partir del diagnóstico para poder diseñar un proyecto que contemple los puntos anteriores y sobre todo las necesidades reales y no sobre supuestos.
A partir de allí, avanzamos sobre una primera propuesta que comenzamos a pivotear juntos, hasta diseñar la acción a medida de tu organización.
Ejecutamos y resolvemos
Los imponderables ocurren en los proyectos como en la vida misma. Sin embargo, nuestros clientes pueden sentir seguridad que el equipo estará al pie del cañón para resolver cualquier circunstancia inesperada.
Cuando hablamos de inesperado, no siempre se trata de algo negativo, sino que no estaba contemplado en el diseño y el plan final. Nuestra capacidad de adaptación, iteración y metodologías ágiles contribuyen a una resolución a tiempo.
Relaciones duraderas
Esta forma de involucrarnos como aliados junto a nuestros clientes permite construir relaciones claras, leales, confidentes que se afianzan con cada acción realizada, cada proyecto finalizado y cada logro compartido. Porque la satisfacción de nuestros clientes es también la nuestra.
Esto permite construir confianza, un pilar clave en la relación. Por ello, cada día nuestros clientes nos vuelven a elegir y nosotros los elegimos como partners en este camino.